Mijaíl Kutúzov es uno de los grandes héroes de la Guerra Patria de 1812 contra Napoleón, en la que alcanzó el rango de Mariscal de Campo y el título de Su Serena Alteza Príncipe de Smolensk. Fue el primero en obtener todos los grados de condecoración de la Orden de San Jorge, el principal galardón militar ruso
La guerra contra Napoleón comenzó por una retirada de las tropas rusas hacia el interior del país. Los Ejércitos 1º y 2º del Oeste fueron incapaces de contener la ofensiva napoleónica. Ante los primeros reveses, la nobleza rusa empezó a reclamar un cambio en la jefatura militar. Kutúzov fue nombrado comandante en jefe de las tropas rusas, principalmente, porque gozaba de un gran respeto en el seno de la sociedad. Su nombramiento alentó al pueblo y los soldados.
Según testimonio de uno de sus contemporáneos, Kutúzov formuló así su estrategia en la guerra contra Napoleón: “No lo vamos a derrotar, lo engañaremos”. Ante la superioridad numérica de las tropas francesas, Kutúzov no tenía otra opción que seguir retrocediendo, pero, con la llegada de los primeros refuerzos, optó por librar una batalla general en los accesos a Moscú.
La batalla de Borodino, la primera y única de esa guerra y una de las más grandes de aquella época, tuvo lugar el 26 de agosto (7 de septiembre, según el calendario nuevo) de 1812. Los franceses sufrieron considerables bajas, los rusos perdieron casi la mitad de su ejército. Kutúzov ordenó abandonar el campo de la batalla y, luego, Moscú. Fue entonces cuando realizó su famosa maniobra de Tarutino, al retirar las tropas hacia el pueblo del mismo nombre, ubicado al suroeste de las posiciones francesas, cerrándole al ejército de Napoleón el mejor camino hacia el interior del país.
Al fracasar en su intento de cerrar un tratado de paz con Rusia, el 7 (19) de octubre, el emperador galo ordenó la retirada de su ejército desde Moscú. Planeaba retroceder en dirección de Kaluga, donde había aprovisionamiento y forraje, pero fue detenido por las tropas de Kutúzov en las cercanías de Maloyaroslavets y forzado a seguir el camino de Smolensk, retirándose por las provincias devastadas por su ejército durante la ofensiva.
Las tropas regulares y los guerrilleros rusos lo persiguieron en toda esta retirada, atacándolo por los flancos, pero evitando los combates frontales. A raíz de esta táctica, el ejército francés fue casi totalmente eliminado.
Para abril de 1813, las tropas rusas, que iban persiguiendo al enemigo, atravesaron la frontera y alcanzaron el río Elba en Prusia, hoy Polonia. El 5 de abril, en la localidad de Bunzlau, Silesia, Kutúzov se resfrió y murió pocos días después, el 16 (28) abril de 1813. Su cadáver fue embalsamado, transportado a Rusia y sepultado en la catedral de Kazán de San Petersburgo.
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